La era de los dispositivos «wearables»
-vestibles, en español- no ha hecho más que despegar. Hay muchas propuestas,
pero ya mayoría se quedan en meros receptores de notificaciones. Sin
revolucionar el mercado, pero con una interesante propuesta, TomTom ha lanzado
un nuevo reloj deportivo Runner Cardio GPS
que pretende monitorizar la actividad física del usuario.
Este dispositivo, recubierto de una capa de
goma, es sumergible a 50 metros de profundidad. Una característica esencial
para el tipo de usuario al que va dirigido. Deportistas todoterreno.
Para ello, la firma especializada en navegadores ha ideado un concepto de reloj
para el amante del ejercicio, aunque sus registros se limitan a apasionado del
«running», cada vez más en boga.
Con un precio contenido en los 269 euros, el dispositivo
incorpora un pulsómetro que funciona perfectamente, fluido, preciso y rápido.
Este ha sido testado con otros monitores de ritmo cardiaco profesionales que se
encuentran en gimnasios. Los corredores pueden así establecer zonas de
frecuencia cardiaca y variar incluso la intensidad del entrenamiento en función
del objetivo que quieran alcanzar.
La compañía advierte que para medir el ritmo cardíaco de forma precisa hay que llevarlo
ajustado, algo que no es un problema para los que estén
acostumbrados a portar otro tipo de reloj puesto que su peso son solo de 63
gramos. De esta manera, el usuario puede olvidarse de llevar esas agobiantes y
poco prácticas cintas cardiacas que se ajustan al pecho.
En términos generales, este liviano y simple «smartwatch», que se vende en dos
colores (rojo y negro), es muy práctico. Su manejo se realiza a través de un
botón que controla las diferentes funcionalidades, aunque su usabilidad resulta en ocasiones algo complicada mediante un pad direccional
situado en la parte inferior de la pantalla. De hecho, se echa en
falta, tal vez, que la pantalla (no es a color) sea táctil, lo que mejoraría la
experiencia. Pero en conjunto, cuenta con las principales funcionalidades que
demandaría un corredor.
Estos registros son las calorías consumidas, la
distancia recorrida, el tiempo y las pulsaciones. El receptor GPS incorporado
proporciona información sobre la marcha en tiempo real y sin la
necesidad de portar un teléfono móvil inteligente. Al finalizar la actividad
deportiva, se puede visionar la ruta completa y otras estadísticas en una
aplicación que se sincroniza fácilmente. De este modo se puede controlar la
evolución.
Fuente: ABC.es
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